Ayer jugué la primera batallita del año, a Punkapocalyptic, mis chatarreros contra hijos de la sangre negra camuflados de Marines del Caos, bueno, es que fue una partida introductoria para un amigo.
No hubo vencedores ni vencidos porque fue un poco a probar las reglas sin llegar a terminar la partida, jugamos el escenario de la rebelión de la máquinas, todo un clásico.
Después del exitazo que he tenido en 2018 con mis objetivos, que ya los había cumplido la primera semana de septiembre y todavía me sobró tiempo para pintar un 50 % más de las miniaturas, para este 2019 voy a ser mucho más ambicioso, el objetivo me lo pongo en 150 miniaturas, de las cuales solo he decidido fijo 126: la Santa María (¿al tercer intento el definitivo?), mis tiránidos (unas 80 minis) y mis hombres bestia (45 minis), las restantes las decidiré a lo largo del año, puede que sea algo o de Star Wars o de 40k, ya veré
A esto le añado una novedad, y es que voy a tener en cuenta también el tiempo de hobby dedicado al juego y no solo al pintado-montaje, con lo que añadiré objetivos jugones: rol, warhammer, warhammer 40k y juegos de escaramuzas.
De esta forma mis objetivos miniaturiles para 2019 quedan así:
Y los objetivos de batallitas para 2019 son:
Pese haber cumplido más que de sobra mis objetivos miniaturiles de este año sigo dedicando tiempo al hobby, no tanto como me gustaría pero algo sí. La mayor parte del mes lo he dedicado a ir poco a poco avanzando con la maqueta naval de la Santa María, a una partida de rol (más de la mitad de mi tiempo de hobby de este mes se lo he dedicado a jugar a rol, lo que está muy bien) y a pintar alguna cosilla suelta, lo que me pone cada vez más cerca de las 100 miniaturas pintadas en 2018.
Noviembre va a ser algo tranquilo, tengo bastantes cosas pendientes del Mundoreal así que no estoy seguro de que pueda dedicar mucho tiempo al hobby, pero nunca se sabe.
Así van los objetivos de miniaturas 2018:
Fuera de programa:
Tres áreas de efecto de bombas de humo para Punka. Hice igual que para los marcadores de hace tres días (ver entrada anterior), pero después de pegar el papel a la goma eva y recortar, añadí también algodón, al que le he dado una capa de imprimación superficial con Negro de Vallejo en spray. El resultado es que se parece bastante al humo.
Hace tiempo que tenía pendiente de hacer los marcadores para Punka, sobre todo teniendo en cuenta que ya hace unos años que jugamos :-P.
Pasos muy sencillos:
Ahora debería ponerme también con las plantillas de bombas de humo para mis chatarreros, y así terminaría ya con los marcadores pendientes del juego.
2017 ha sido una año muy ambicioso a nivel de miniaturas, especialmente a nivel de escenografía, y pese a que fue un año difícil conseguí cumplir todos los objetivos menos uno:
Fuera de los objetivos también pinté 1 zooantropo, a Pintaius (mi personaje de D&D), 3 orkos y 2 bandejas de transporte para mi banda de Infinity.
Esto quiere decir que en total he completado 54 miniaturas, 101 elementos de escenografía, 1 contador de turnos, y 3 bandejas de transporte. Hasta ahora ha sido mi mejor año pintando miniaturas y maquetas y estoy muy contento con los resultados.
Ahora la parte no completada, la Santa María, que así se ha quedado al finalizar el año:
Con el primer forrado del casco a medias, es decir, un 30 % de la maqueta. Me hubiese gustado terminarla este mes, pero esto era realmente ambicioso ya que sabía que no tenía tiempo 😛
Ya he terminado los 3 olvifantes para el escenario «Cementerio de mascotas» de Punkapocalyptic. Con esto he terminado toda la escenografía para Punka, y creo que ahora me pasaré una buena temporada sin hacer escenografía, aunque ha sido muy entretenido y lo he pasado bien también me he saturado un poco, jejeje.
A continuación (y tras el salto) el paso a paso de cómo hice los olvifantes:
8 piezas de formaciones rocosas y 6 nidos de huevos de terraburón para el escenario «Temblores» de Punkapocalyptic.
Las formaciones rocosas son muy sencillas, pedazos de poliestireno extruido cortado un poco bordamente y pegado con cola termofusible. Luego se pinta de tonos de marrón y arena.
Los nidos de los huevos son bolitas de manualidades de los chinos pegadas a peanas. El pintado es similar a las formaciones rocosas.
Casi se me olvida publicar esta entrada, esta semana estuve tan ocupado que ya se me olvidaba. Pese al Mundoreal este mes me dio tiempo a terminar los hormagantes y a hacer un poco de escenografía, así van los objetivos miniaturiles después de noviembre:
Ya solo queda un objetivo, la Santa María, y dado que tengo 2 oposiciones este mes de diciembre, añadido al trabajo, y añadido a mi actividad en el taller de talla, dudo mucho que lo consiga cumplir 😛 aún así lo intentaré.
Aprovechando que me sobró algo de tiempo después pintar parte del hormagante de hoy hice los 4 excrementos de olvifante para el escenario «Cementerio de mascotas» de Punkapocalyptic. Son muy sencillos: una pelotita de manualidades de los chinos pegada con cola termofusible a una peana de Games Workshop; después solo hay que pintar la peana de marrón.
10 de hobby 